martes, mayo 07, 2013
domingo, mayo 05, 2013
viernes, mayo 03, 2013
Minuit à Paris
Los magnolios y los cerezos
estaban a punto de florecer en Dublín, pero
las manos que mecían el idioma español en las orillas del Liffey ensuciaban
metáforas y relaciones. Me preguntaba quién las permitía mientras hacía la
maleta.
Paris nos recibió con un día
soleado y calles llenas de bullicio. Nos hospedamos en la antigua embajada de
Inglaterra, en el apartamento donde Benjamín Franklin escribió el Tratado de
Paris, donde también vivió Hemingway en 1921, donde etcétera, etcétera, etcétera.
El peso de la Historia
y las historias me paralizaron: no pude escribir una línea. Derriére son sourire une volonté de fer.
Desde la Rue Jacob partimos hacia
el Instituto Cervantes, Boulevard Marceau, donde nos regalaron rosas rojas. Cómo
echamos de menos a Juan Manuel Bonet en Dublín. Luego subimos y bajamos el río hasta llegar a
nuestro añorado Keith Haring. Hay dos niveles en el alumnado: el de aquellos que
hicieron el curso de la Generación Beat
y me imagino que otro. William Bourrougs
fue mentor de Keith Haring. En fin, la literatura no aniquila el amor por el
arte visual, por lo menos en París. Acaso, en Irlanda...Mi adorado Francis
Bacon debería haber sido francés. Los dublineses lo consideran algo así como un
psychopath. Tarde libre.
Tarde casi libre, Mark me pidió
que llevara a Amal a la
Shakespeare. Amal tiene el pelo oscuro y corto, ojos de
ardilla joven, pero andares lentos e inseguros. La librería estaba abarrotada
de catalanes algo ruidosos. Le conté anécdotas de Joyce y Sylvia Beach, pero no parecía que a
ella le interesara mucho mi rollo. Le compré un helado de chocolate y nos sentamos
delante de la fachada de Notre Dame, 850 años y miren ustedes cómo se conserva,
comentó un guía español ¿Tú de dónde eres?, me dijo Amal. Límpiate el labio
superior, le sugerí. Como si no me hubiera oído. Nací en Barcelona. Yo en Bagdad.
Un viento que parecía dublinés
llenó el cielo de pelos que alborotaron
a los turistas.
Mi marido era opositor de
Sadam.
Amal, me parece que va a
llover.
Fue detenido y comenzó una
huelga de hambre.
Podemos entrar en la iglesia.
Sólo duró tres días, le pegaron
un tiro en la cabeza.
Deben guardar silencio, ha
empezado la misa.
El régimen no permitía las
huelgas.
Silencio
Ahora han encontrado su cuerpo
en una fosa común.
Je vous salue, Marie plaine de
grâce, le Seigneur est avec toi
Puede ser que mis cuatro
cuñados estén también allí.
Mojé el pañuelo en agua bendita
y le limpié la mancha de chocolate
Amal sonrió.
Al salir el empedrado todavía
estaba seco.
Regresamos al apartamento de
Rue Jacob. Nos duchamos y vestimos de negro. Maquillé a Amal. Se moría de risa.
Y en un lugar de moda, que no voy a mencionar porque de verdad no me acuerdo
del nombre, arropada por el griterío, Amal me contó que Sadam la envió como
escudo humano, junto a otros familiares de disidentes, en su mayoría mujeres y
niños, a la frontera con Irán. Allí, Amal descubrió que estaba embarazada, Allí,
pasaron muchas cosas.
Minuit à Paris.
24 de Abril. D´oú vient le mal ? L´hypothèse Arendt. A las dos nos gustó
Tendría que haber escrito sobre Eileen Gray, Jean Cayrol, Proust, Borges, las celebraciones por la nueva ley francesa del
matrimonio homosexual y vaya usted a saber.
Los rododendros ya han florecido en Dublín.
El jardín se ha llenado de pájaros de colores que devoran los brotes.
A John le ha gustado la
corbata, escribe Amal, y las niñas están encantadas con las camisetas. Tienes
que venir a Londres.
"Fortune, a much-maligned lady". Decline and Fall, Evelyn Waugh
"Fortune, a much-maligned lady". Decline and Fall, Evelyn Waugh
miércoles, mayo 01, 2013
Día del libro en París
Le prometí a Hispanolia, por cierto, dónde se mete, que El Mono Rojo celebraría el Día del Libro en París, en el Collége de France para más señás. Allí nos sentamos para homenajear a nuestro admirado Roland Barthes. Hispaniola sabe mucho de Barthes. También rendimos armas en otros lugares. Escribiré unas líneas sobre el tabaco, la genialidad y los no fumadores. No escribiré esas líneas porque empieza a llover.