De Tiresias y Apollinaire
Una alumna asocia La Cena y el Tiresias de Apollinaire. Espero vuestros comentarios.
Tiresias es un adivino griego que aparece en todos los episodios mitológicos relacionados con la ciudad deTebas. Fue él quien aconsejó que se entregara el trono de la ciudad al vencedor de laEsfinge; más tarde sus revelaciones conducirán a Edipo a descubrir el misterio que rodeaba su nacimiento y sus crímenes involuntarios.
Tiresias era ciego desde joven. Según algunas versiones, su ceguera había sido causada por la diosa Atenea, que le castigó así por haberla sorprendido mientras se bañaba, aunque como compensación le concedió el don de ver el futuro. En la Odisea (Canto XI), Ulises irá a consultarle al Hades para averiguar las circunstancias en que se desarrollará su regreso a Itaca. Según otras versiones, Tiresias habría sorprendido a dos serpientes mientras se apareaban y había matado a la hembra, quedando convertido en mujer. Siete años más tarde, en circunstancias similares, mató al macho y recobró su sexo primitivo. Esta experiencia única hizo que Zeus y Hera recurrieran a él como árbitro en una discusión sobre quién, el hombre o la mujer, experimentaba más placer en el amor. Cuando Tiresias afirmó que la mujer experimenta nueve veces más placer que el hombre, Hera, indignada le castigó dejándole ciego, pero Zeus le otorgó el don de la profecía y una larga vida equivalente a la de siete generaciones humanas. Volveremos a encontrarle, en efecto, en el ciclo tebano, desde la época de Cadmo hasta la expedición de los Epígonos.
El significado esencial de la figura de Tiresias reside en su papel de mediador. Es ante todo, por sus dotes proféticas, un intermediario entre los dioses y los hombres, pero lo es también, por su condición andrógina, entre los hombres y las mujeres y, por la duración excepcional de su vida, entre los vivos y los muertos.
El personaje reaparece en la literatura europea en su doble carácter de profeta y de andrógino desde el Edipo rey de Sófocles(425 a.C.). En el drama surrealista de Apollinaire Las tetas de Tiresias (1917), Teresa, una joven feminista casada que se niega a tener hijos, se convierte en un "señor mujer" después de liberarse de sus pechos y adoptar el nombre de Tiresias; su marido, en cambio, se ocupará de traer miles de hijos al mundo para repoblar la ciudad de Zanzíbar. Teresa reaparece al final de la obra bajo los rasgos de una cartomántica, paródico vestigio del papel profético de Tiresias. LA figura del adivino tebano desempeña un papel importante en la obra del poeta inglés T.S.Elliot Terreno vago (1944), donde, a través de su función de adivino, puede aparecer como una figura simbólica del creador.
Tiresias era ciego desde joven. Según algunas versiones, su ceguera había sido causada por la diosa Atenea, que le castigó así por haberla sorprendido mientras se bañaba, aunque como compensación le concedió el don de ver el futuro. En la Odisea (Canto XI), Ulises irá a consultarle al Hades para averiguar las circunstancias en que se desarrollará su regreso a Itaca. Según otras versiones, Tiresias habría sorprendido a dos serpientes mientras se apareaban y había matado a la hembra, quedando convertido en mujer. Siete años más tarde, en circunstancias similares, mató al macho y recobró su sexo primitivo. Esta experiencia única hizo que Zeus y Hera recurrieran a él como árbitro en una discusión sobre quién, el hombre o la mujer, experimentaba más placer en el amor. Cuando Tiresias afirmó que la mujer experimenta nueve veces más placer que el hombre, Hera, indignada le castigó dejándole ciego, pero Zeus le otorgó el don de la profecía y una larga vida equivalente a la de siete generaciones humanas. Volveremos a encontrarle, en efecto, en el ciclo tebano, desde la época de Cadmo hasta la expedición de los Epígonos.
El significado esencial de la figura de Tiresias reside en su papel de mediador. Es ante todo, por sus dotes proféticas, un intermediario entre los dioses y los hombres, pero lo es también, por su condición andrógina, entre los hombres y las mujeres y, por la duración excepcional de su vida, entre los vivos y los muertos.
El personaje reaparece en la literatura europea en su doble carácter de profeta y de andrógino desde el Edipo rey de Sófocles(425 a.C.). En el drama surrealista de Apollinaire Las tetas de Tiresias (1917), Teresa, una joven feminista casada que se niega a tener hijos, se convierte en un "señor mujer" después de liberarse de sus pechos y adoptar el nombre de Tiresias; su marido, en cambio, se ocupará de traer miles de hijos al mundo para repoblar la ciudad de Zanzíbar. Teresa reaparece al final de la obra bajo los rasgos de una cartomántica, paródico vestigio del papel profético de Tiresias. LA figura del adivino tebano desempeña un papel importante en la obra del poeta inglés T.S.Elliot Terreno vago (1944), donde, a través de su función de adivino, puede aparecer como una figura simbólica del creador.
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home