viernes, marzo 14, 2008

Odiseas. Literatura.Varios.

He tardado en aparecer, pero vengo con parabienes porque todo resultó genial. Regreso del
Templo del Sol y estoy pletórico. Al fin es primavera y los nubarrones se han disipado. Enhorabuena a las Desoladas porque todo ha ido bien. Somos grandes. Ahora los rusos nos invaden: Nikolai Sevolodovich, Stepan Trofimovich, Shatov, Felippov, capitán Lebiadkin, Marya ,
Lizabeta, qué despliegue de personajes, este Dostoyevski, menuda caja de sorpresas. Los Demonios me han servido para repasar literatura que últimamente con tanta investigación la tenía abandonada. Mira que Varvara Petrovna, qué carácter. A mí las mujeres tan enérgicas me subyugan, me pasa igual con la Castafiore, otra que tal baila, como se ponga a dar el do de pecho hace temblar las lámparas del salón, menos mal que cada día estoy más sordo y no me entero porque la ópera a mí, tararí que te ví. A la boda de Isabel me trasladé en avioneta y casi nos estrellamos. Es que Móstoles y Leganés dicen que es El Más Allá y me lo creo, pero mereció la pena ver a la encantadora y dulce novia y a todos sus acompañantes. Nosotros tampoco fuimos mancos. Había a mi lado unas señoras de muy buen ver. Tintín cambió sus bombachos por pantalones de vestir. También fueron Hernández y Fernández, camuflados, por si irrumpía algún patoso. Yo despeinado como siempre, pero con mis nuevas lentillas. La Castafiore con sus vestidos de cóctel y su abrigo y gorro de piel. El capitán Haddock no se enteró-. No le dijimos nada por miedo a sus inevitables melopeas, porque ya sabeis que había traca final. Le hubieran echado sin contemplación. Mejor, mejor así. La tarde transcurrió feliz y yo me volví en mi avioneta despidiéndome de todos. El regreso me sirvió para hacer un croquis sobre el invento que acabo de idear: un televisor a todo color. ¿os imaginais el bombazo que eso puede ser? Besos, besos y abrazos a todos. TORNASOL.