viernes, febrero 17, 2012

Áth na Sceire,

Paseamos por las veredas neblinosas de Enniskerry ,huimos del palacio y los jardines, yo perdida en mis silencios y mi amigo en sus confesiones.Los cerezos ya moteados de manchitas blancas balbucean la primavera.Las palabras resbalan fracasos y desalientos y yo susurro a mi amigo: tengo frío y que bueno un tecito caliente .Y me pregunta si entiendo y los pájaros negros picotean la hierba.
Paseamos por las veredas neblinosas de Enniskerry y empujo a la realidad para sosegar a mi amigo. Y en medio del valle aparece el Ritz y yo me rio, pues los dioses a veces lazan edificios para sanar las almas marchitas.

Siempre borrador.